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ANTOLOGÍA DE POESÍA DE NEUQUÉN

por Ricardo Costa

Carina Medina

 

Tirarles carne cruda con vidrio molido.

Podría

envenenarlos.

Perros podridos

los de mi vecina.

Tres tristes mierdas del frente

aullando

en la caja de resonancia de mi calle.

Dormir

una utopía.

Miguelitos en la esquina.

Muerte al camión de cliba

y al kraken del motor y el

 compactado de bolsas

peso ajeno que

 siempre

 es

sobre mi vereda.

Saltan las alarmas.

El batata de enfrente llora, el salchicha chilla,

los de al lado

 engolan como latas.

Debería dispararles desde mi ventana.

Pero seguro que

la gorda espanto de su dueña

compraría otro,

otra elección desacertada,

musicalmente hablando.

Un chihuahua

o un gran danés

con cantos de ballena.

Para no convertirme en serial killer vecinal

mudate conmigo.

El metro diez de esas piernas en las mías

son la encrucijada que me ubican

entre una vida de crimen

o de andar despierta.

                                                         de No andarse con chiquitas (2017) 

 

 

 

Costuras

 

De lo aprendido y practicado

en siestas eternas

a los pies de mi abuela

 

de lo elegido en color

molde y textura.

En las clases de catequesis

y en las revistas Burda

supe

 

tejer orejeras

que tapen

 lo que no debe oírse

bordar en punto cruz

 la boca

para que no salga ni entre

esto

o “lo otro”

 

hilo perlé

punto cadena

así los ojos

no ven aquello

 no desean

todo

 

costureros con botones

alfileteros con puntillas

 

mis nudos

                    los más firmes

 

y

aunque se empeñaron las siestas

las clases

y las revistas

                      coser no pude nunca

 

mala aprendiz

la entrepierna

me quedó mal hilvanada

                       Así escribo.

 

                                   de No andarse con chiquitas (2017)

 

 

 

Carlos Blasco

 

Gomería El Rulo, el Rulo está adentro, se lo ve a la pasada en elástico equilibrio sobre una rueda de camión tirada en el piso, haciendo zafar el aro sin que le arranque la cabeza mientras sus tatuajes verde birome ya son una mitología de tres cuadras a la redonda. El compresor se enciende, aspira una continua bocanada de chivo, caucho, mugre... comprime moléculas y forja el olor a gomería. En un rincón, debajo del almanaque de las tetas grandes, la cumbia se cae a pedazos de la radio rota y negra, el Flaco lo acompaña, ceba mate y el mecanismo se lubrica. El Rulo gorgotea, se asoma a la calle y escupe lejos, saluda a un colectivo... el universo está en orden.

 

de Microfilm (2014)

 

 

De 200 a 250 es el número de ominosos jotes negros que sobrevuelan en círculos la destilería donde una vez me pegaron por ser docente. Esto ocurre por las emisiones de metanotiol, que es el mismo gas que despide un cadáver en descomposición. A veces la literatura ya viene hecha.                                                                                       

                                                        de Microfilm (2014)

 

 

 

Romina Olivero

 

Princesa pobre,

                 harapienta

a vos te invoco.

 

No me conforma una

pura e impecable Virgen María

                              su ropa está demasiado limpia,

                              seguro que alguna doméstica

                              lava su manto diariamente.

 

La de Guadalupe me cae mejor; es más negra

Y más mugrienta,

como yo;

pero me queda muy lejos.

 

                      En cambio vos, mi princesa pobre,

Sos como la Gilda;

esa también supo lo que es la cumbia.

Te rezo a vos, te traigo agua

porque no tengo un mango

y estoy embarazada

de un bebé que no quiero,

de un hombre que no debía

que me sigue dando

que no entiende que estoy delicada ahora

 

                        y tengo miedo mi santa

pero no me quejo.

        Vos la pasaste peor.

Por eso el agüita.

 

                        de Creer o reventar (2013)

 

 

 

 

Es día de retoque de raíces.

Ya lo postergué demasiado,

mi color lo reclama.

Igual, no me pesa.

Al contrario,

medio que estoy contenta

                   porque voy a verla.

Mi peluquera es la mujer más intensa que conozco.

Habla mucho

monocorde

con ese tono chileno que tan atractiva la vuelve.

Su boca perlada se mueve sin pausa

durante los 45´del retoque.

La tintura penetra en mi cerebro junto con sus teorías extraterrestres.

Escupe geniales ideas sobre seres que habitan nuestro alrededor,

sobre el dolor de la tierra, las energías, las flores de Bach

y no sé qué mierda más.

Yo muero de amor cuando se enoja con mi ignorancia

acerca del “más allá”.

Su colorada cabellera se enciende en un tono demoníaco

que no aparece en ningún catálogo de tintes posibles.

 

Es la mejor colorista del barrio,

todo tiene su precio.

                                           de Creer o reventar (2013)

 

 

Tomás Watkins

el cielo se encapota y todo truena

bebo del vaso

negro como la muerte

hasta las últimas consecuencias

hasta que se cansan las ventanas

entonces sueño lo que ocurre

en la otra orilla

de esta cabeza doliente

 

yo vi a Li Po bajar por el Limay

esperando una muestra de cariño

sucio de varios días de viaje

exento de varios días de olvido

con su sonrisa implacablemente ebria

con su viejo morral

de poeta gastado

Li Po

nunca lo sabremos

el crepúsculo nos sorprende así

despacio

y para siempre

                                               de 26 (2004)

Nocturno

 

En los barrios, los chicos

son cada vez más chicos y tienen

fierros más grandes;

no hay frío de noche si estás

abrigado con algo especial

 

Algunas chicas

no tienen edad; sus piernas

han visto pasar hijos y rigores

más grandes

 

Luz mala de luna enferma:

exhibición de fantasmas y ruidos

a infancia limitada

 

La noche

vence

 

          de Hora blanca (2015)

 

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DE LOS AUTORES y AUTORAS

*** Carina Rita Medina (Córdoba, 1979, neuquina por adopción). Profesora en Letras, recibida en la UNCo. Docente y gestora cultural. En poesía, publicó junto a Romina Olivero Creer o reventar (El Suri porfiado, Bs. As 2013), y como única autora: No andarse con chiquitas (El Suri porfiado, Bs. As 2017). Es co-coordinadora del Proyecto PUENTES, cuyo objetivo es la promoción y divulgación de letras producidas en Neuquén

 

*** Carlos Blasco (Plaza Huíncul, Neuquén, 1979). Es profesor de literatura, narrador y poeta. Parte de su obra fue publicada en diversas antologías: Territorio Literario (UNC. Educo, 2004); Insurgentes (Ed. Limón, Neuquén, 2005); Desorbitados (FNA, 2009); Argentinische Literatur (Ed. Wagenbach. Berlín, 2009) y en Neues von fluss (Ed. Ltrétage. Berlin ,2010). En 2014 publicó: Microfilm (Vela al Viento. Cdro. Rivadavia, 2014)

 

***Romina Olivero (Bahía Blanca, 1979) Reside desde chica en la ciudad de Neuquén. Es profesora en Letras por la UNCo. Publicó, junto a Carina Medina, Creer o reventar (El Suri porfiado, Bs. As 2013), y como única autora Acá es así (El Suri porfiado, Bs As, 2017). Es co-coordinadora del Proyecto PUENTES, cuyo objetivo es la promoción y divulgación de letras producidas en Neuquén

 

*** Tomás Watkins nació en Neuquén, en 1978. Ha publicado 26 (Libros Celebrios. Neuquén 2004), Mitología (EDUCO, Neuquén, 2012), Bien de consumo y Hora blanca (Espacio Hudson, Rada Tilly,2015). Es miembro fundador del grupo Celebriedades. Dirigió el proyecto audiovisual de escritores Almacén literario (www.almacenliterario.com.ar). Es co-coordinador del Proyecto PUENTES: promoción y divulgación de letras producidas en Neuquén. También es el editor del Centro de Documentación e Información Educativa.

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